Casa de oro es una de las muchas propiedades existentes en playa troncones que se rentan a los vacacionistas.
Esta villa cuenta en su primer nivel con un área principal donde encontrarás la cocina (estufa, cafetera, microondas, licuadora, vasos, platos, ollas, sartenes, garrafón de agua potable, dos refrigeradores), sonido estéreo, medio baño, un comedor para 8 personas, una barra con dos bancos, una sala y hamaca; ( en los cajones de la mesita de centro hay cartas y juegos de mesa para una velada amena), pero el toque distintivo es que todo lo anterior está dentro de una palapa, es decir en un área abierta por lo que no existe aire acondicionado, sólo ventiladores.
En esa misma zona encontrarás la alberca con borde infinito y la salida trasera donde verás unos escalones que te conducen primeramente a una regadera exterior y a su vez a un camino que te da acceso a la playa, este detalle es genial ya que las demás propiedades (con excepción de casa luna del mar) no cuentan con escaleras para descender a la playa por lo tanto tienes que hacer un esfuerzo adicional si quieres entrar o salir al mar.
Al lado de la alberca encontrarás un dormitorio principal amplísimo que cuenta con cama King, ventilador y aire acondicionado así como baño toallas y jabón. En el segundo piso se encuentra una recámara exactamente igual que la primera y en el tercer piso hay una zona para disfrutar de unos exquisitos atardeceres, o mecerte en su hamaca al arrullo de las olas del mar.
Existe también un área accesoria que cuenta con un asador (carbón o leña no incluidos) y dos bungalows; en el interior de cada uno encontrarás una cama King, ventilador, aire acondicionado y un baño completo así como garrafones de agua potable.
Lo mejor del lugar es el matrimonio encargado de cuidar la propiedad: Enedelia realiza la limpieza de la propiedad y además es una gran cocinera, puedes llegar a un arreglo económico para que te prepare desde una sola comida o varias, gracias a esa flexibilidad ella nos preparó langosta, camarones y pez vela deliciosos
José es el mejor amigo que te puedas encontrar, es súper amable, servicial y siempre está dispuesto a procurar que tu estancia sea placentera, pues no sólo le da mantenimiento a la alberca y al resto de la casa sino que además conoce dónde, cómo y cuándo puedes conseguir los insumos que necesites: por ejemplo nos consiguió langosta, y le llama a los vendedores de fruta, verdura y mariscos que pasan casi diario a la puerta de la casa y también nos proporcionó unos deliciosos cocos que él mismo cortó y abrió (de paso arregló unos focos fundidos) también sabe sobre los horarios para la liberación de tortugas y si quieres un paseo a caballo o un masaje, él conoce a las personas indicadas.
En una sola palabra Casa de Oro es sinónimo de DESCANSO pues a diferencia de un resort, no hay restricción de horario para usar la alberca, no estás lidiando con otros huéspedes escandalosos y no tienes que levantarte temprano para tener que alcanzar el desayuno o alistar a la familia bien bañada y vestida y corriendo para llegar a tiempo para la cena en el restaurante de especialidades.
Algunos aspectos a tomar en cuenta: La propiedad está en el medio de un lote vacío y de un estero por lo que no es extraño que encuentres fauna rondando por algún rincón o debajo de algún plato (hormigas, iguanas, arañas y cuijas o besuconas) También los escalones de la alberca no son muy amigables para las personas que tengan dificultades para caminar. Los insumos básicos pueden ser más caros de lo habitual (jitomate 20 pesos kilo, huevo 43 pesos kilo) por lo que es recomendable llevar despensa o programar una ida al mercado de Zihuatanejo; sin embargo la distribución de la casa, la infraestructura de la alberca, el precio de la villa y los encargados del lugar hacen de CASA DE ORO un sitio inmejorable para vacacionar.
Si preguntas la razón de por qué éste pedazo de cielo es No Recomendable, se debe a que este pequeño tesoro es difícil de compartir jajaja...ojalá y siempre estuviera disponible, sé que es egoísta pero es verdad.
P.D. Espero que puedan mejorar el acceso y salida a la piscina, haciendo los escalones no tan altos, transformar su sistema de cloración a salina, lo cual es más amigable con la piel y el cabello; también sería genial poner un jacuzzi(mucho mejor si estuviera en el ultimo piso) y que incrementaran la velocidad del wi fi. Si quieres hacer feliz a José llevale una bolsa grande de papas fritas de las de bolsa amarilla jejeje.